Desde hace ya un tiempo hemos visto como la factura energética se ha elevado hasta cotas nunca antes alcanzadas. Pero este escalón se vio especialmente acentuado con la nueva factura que entró en vigor en junio de 2021, que desde entonces pagan cantidades aún mayores.
El coste de los suministros y las materias primas ha agravado una situación para la que el Gobierno se ha visto obligado a implementar nuevas medidas, como la limitación al precio del gas para generar la electricidad o la reducción del IVA hasta el 5%.
En vista de esta subida descontrolada de los precios de la energía, una de las posibles soluciones a adoptar para tener un mayor ahorro energético es optar por soluciones sostenibles y respetuosas con el medido ambiente.
La energía solar
El funcionamiento de las placas solares se basa en captar la energía procedente del sol, transformándola en energía eléctrica para uso personal. De este modo, podemos ahorrar considerablemente al cocinar, ducharnos o poner la lavadora. Además, no hay peligro alguno de quedarse sin luz en los días nublados o por cualquier otra razón circunstancial. Los hogares que apuestan por la energía solar como alternativa también están conectados a la red con una tarifa ajustada a su autoconsumo.
¿Cómo comenzar la instalación de las placas solares en nuestro hogar?
El primer paso a seguir es comparar precios tanto de placas solares como de instalación y buscar otras distribuidoras hasta encontrar el precio que más se ajuste a nuestro bolsillo, siendo este uno de los primeros pasos para ahorrar. Dentro de las energías renovables, la solar no es la única a la que podemos recurrir, pero los expertos apuntan a que la energía solar puede ofrecer un ahorro de más del 70 % en la factura eléctrica.
Cada vez el precio de instalación de las placas solares es más accesible, y los expertos coinciden que la inversión que se lleve a cabo puede amortizarse con tan solo cuatro años desde su instalación. Además, año tras año encontramos más empresas que se dedican a la instalación de placas solares fotovoltaicas en hogares y comunidades para abastecer las viviendas de energía gratuita, lo que puede contribuir a reducir la factura de la luz de manera considerable.
Un hogar medio puede necesitar una instalación que le ayude a reducir considerablemente el importe de su factura de la luz por unos 5.000 euros de media (este es un precio estimado). Para conseguir que este gasto no suponga un peligro para la estabilidad económica de la familia, existen soluciones de financiación cuyo coste puede ser igual o inferior al ahorro obtenido con la instalación de las nuevas placas fotovoltaicas, lo que también facilita su instalación y el comienzo del ahorro en nuestra factura.
Además, algunas empresas grandes, que se dedican a la distribución de energía eléctrica, están ofreciendo a sus consumidores la instalación gratuita de placas solares para fomentar el autoconsumo, de modo que no es necesario hacer frente al temido desembolso inicial, que la mayoría de veces constituye un verdadero obstáculo.
Si me sobra energía solar, ¿me pueden pagar?
Por supuesto, el excedente de energía solar producida por las placas de la vivienda que no es consumida se puede vender a la compañía y compensarlo en la factura de la luz, lo que genera todavía una mayor capacidad de ahorro. Esto viene fundamentado en que las empresas que se dedican a la distribución de la electricidad y a la instalación de placas fotovoltaicas también ofrecen a sus clientes la compensación simplificada de excedente.